BREVE HISTORIAL

BREVE HISTORIA PRIMIGENIA DE LOS MAÑAZOS
(Hoy, Sicuris del Barrio Mañazo)

Se dice que la iglesia católica en uno de sus escritos mas escondidos que ya había una etnia de indígenas seudo nómadas divididos en grupos que su labor de costumbre era el trueque, venta de ganado o carne de nuestras especies nativas (llamas, alpacas, guanacos). Estos grupos se desarrollan solamente en la cuenca del lago Titicaca y el Poopó especialmente con los centros mineros (Phunuy Puchu, rincón de descanso para abrevar), el Chuquiagomarka y Oruro) de la región kolla en jurisdicción del Tahuaintisuyu. Como se llamaban no existen escritos pero hay una suposición lógica pero subjetiva “llamachutis”, pero este vocablo se perdió cuando hubo la intromisión de especies europeas a nuestro hábitat, el ganado vacuno (el toro) en ese entonces visto por nuestros antiguos como animales negativos en su apariencia lógicamente; durante la colonia, república hasta hoy se les conoce como “los mañazos” puesto que el cambio sufrió a consecuencia de no humillarse ante los españoles. El sacrificar al toro español fácilmente y la sorpresa que tuvieron, por consiguiente y propio peso los llamaron “los mañazos”, por la maña y la valentía que tenían.
Con las políticas colonialistas para el control de la población el español decreta los asentamientos urbanos, por distintos factores en esos tiempos los condados y villas en nuestro caso de puñuypampa o “la Villa de San Carlos Borromeo”. Este factor importante trajo como consecuencia la desaparición de mañazos casi en su totalidad, habiendo datos aun que a finales de los años 1800 se estaba sepultando la historia de los famosos mañazos de la cuenca del lago titikaka, uno de los últimos en desaparecer son los grupos de la región de Oruro existiendo hasta los primeros años de los 1900 pero ya adoptando otras actividades, desapareciendo totalmente el “ser mañazo”.

La existencia de los mañazos en puñuypampa a las faldas del apu sayhuani rodeado por el apu cancharani, azoguine y su delicado monumento pétreo natural el huajsapata, contextualizado mágicamente por su espejo de agua el gran titikaka y el no olvidado “supay cancha” mal llamado por los españoles por que era un lugar sagrado para los pagos y sacrificios a la pachamama y al tata inti (para la extinción de nuestras tradiciones y nuestros sitios sagrados monumentaron la catedral de puno).casi pseudo citadinos fue cambiando lentamente sus actividades pero no dejando el testimonio de tradicionalistas con el sacrificio y respeto a la pachamama.

Por indagaciones del historiador Alejandro cano sabemos que el templo de san Juan “se mando a construir en 1591 con el obispo de charcas fray domingo de santo Tomás”. A devoción de la virgen de la candelaria en puno:

En el pueblo de san Juan de puno y en la villa de nuestra señora de la concepción y san Carlos se inició la devoción hacia la virgen de la candelaria con la presencia de imágenes pequeñas de esta virgen en numerosas viviendas puneñas. en una escritura de 1 de agosto de 1707, por la cual Felipe Valdez concedía una vivienda en alquiler al marqués de villa rica (hijo del acaudalado minero José salcedo), se consignaba la imágenes en bulto de “la señora virgen de la candelaria" años después, los devotos de la virgen de la candelaria de la villa de nuestra señora de la concepción y san Carlos, sobre todo, del pueblo de san Juan de puno hicieron que la imagen de la virgen de la candelaria se cobijara en el templo de san Juan; de esta manera, este templo se convertía en santuario de la virgen maría de la candelaria

En ese inicio de la entronización de la virgen de la candelaria como patrona de puno, debemos tener presente que no vino por una disposición de los gobernantes, caso de los anteriores patronos (san Juan, nuestra señora de la concepción y san Carlos), sino que la devoción popular paulatinamente se acrecentaba hasta que finalmente logró imponerse, primero, sobre san Juan, después, sobre los patronos de la villa, la inmaculada concepción y san Carlos.

Ya en esos tiempos las ceremonias de respeto y devoción de españoles, criollos e indígenas era evidente, en escritos de la iglesia que están almacenados en la ciudad de la paz dicen que ya había un grupo de indígenas que se reunían para brindar el respeto a la patrona llegando con regalos y entonando música con flautas de pan y tambores durante mucho tiempo. ya acostumbrados a estos indígenas salían en procesión con toda la población devota por las calles y alrededores, visitando a personalidades importantes de ese tiempo en la cual siempre la virgen candelaria estaba acompañada por los devotos indígenas que ejecutaban sus instrumentos nativos; ese era el segundo sincretismo en silencio que tuvimos que pactar gracias a la mamita virgen maría de la candelaria ya que el primero es el respeto a la iglesia católica española y ellos a nuestras costumbres primigenias con la madre tierra.

Con el pasar de los tiempos ya familiarizados entre dos razas, dos culturas y dos pensamientos con respecto a la visión de nuestro mundo se fue creando un grupo compartido por los criollos e indígenas ese era el mañaceño y el neo citadino que hacían fusión para que juntos rindieran pleitesías a la patrona de todos los puneños, ya conocido como puno y su desarrollo económico era evidente; afines de los 1800 se forma esta nueva historia de los mañazos. Ya citadinos por la extensión urbana ya existen evidencias de una nueva forma de compartir la tradición sincrética de los mañazos. alas albas de 1 de febrero hacían el pago y sacrificio ala pacha mama y al tata inti para luego ir con una entrada de capos hacia el santo lugar de la mamita virgen maría de la candelaria también rindiéndole el respeto, ya con lo que mañazo sabia hacer… entonando marchas, música ancestral apoyados con los criollos formados ya como una familia mañaceña, se veía la fuerza de este nuevo grupo que en esos mismos años ya los conocían como “la comparsa de sicuris de los mañazos” con el desarrollo urbano divididos en barrios los llamaron “el conjunto de sicuris del barrio mañazo de puno” con la sabiduría ancestral de nuestra cultura, el ahora mañazo ya sabia que la virgen de la candelaria y la pachamama es solo uno(dualismo?)… continuara.

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jueves, 20 de marzo de 2014

SOBRE EL SIKURI PERUANO

miércoles, 12 de febrero de 2014
APUNTES PARA LA HISTORIA DEL SIKURI PERUANO

Eloy Uribe Taboada
euribet@hotmail.com

Las flautas de pan más antigua halladas en lo que hoy es el territorio peruano proceden de Caral y Chilca, en la costa del departamento de Lima, hace más de 4000 años. Desde entonces han tenido largos y distintos procesos de evolución, como es el caso de la flauta de pan asentada en el Altiplano conocida bajo el nombre genérico de siku (en idioma aymara).
En base a este instrumento debieron haber sido numerosas las expresiones prehispánicas que se crearan de los cuales sólo algunas son consideradas como supervivientes como es el caso del chiriguano y el ayarachi.
Chiriwanos de Huancané Ayarachis de Paratía Tras la conquista, otras expresiones habrían de crearse o recrearse, para finalmente en tiempos republicanos tener expresiones de las cuales tenemos referencias más directas.
1. EXPRESIONES TRADICIONALES EN BASE AL SIKU
Sabemos que además de los famosos chiriguanos de Huancané también los había en Yunguyo y Ácora2. Ayarachis había, además de los conocidos de Lampa (Paratía y Palca) y Sandia (Cuyo Cuyo, Patambuco); en Carabaya (Coasa), Azángaro (Arapa y Santiago de Pupuja), Melgar (Cupi) y en las islas de Taquile y Amantaní (hoy designados con la denominación aymara de sikuris tras su reelaboración). Últimamente con su presencia en la Festividad de la Virgen de la Candelaria en Puno los lakitas como los de la isla Anapia se han hecho más visibles.
Sikus de extintos ayarachis de Santiago de Pupuja3 Extintos chiriwanos de Yunguyo En Conima se practica el soldado palla palla y en Yunguyo el palla palla y el pulla pulla. Tenemos la referencia del zancayo-chiriguano de Cojata, que por la descripción del uso de ponchos pequeños, trenzas postizas, uso de bombos y ponchos pequeños, parece tratarse del k´oto (Cuentas, 1966).
Soldado palla palla de Conima Palla palla de Yunguyo 
 También hay danzas acompañadas con sikus, como los conocidos imillani y satiri. Pero también está consignado el antiguo kara-puli, de vestuario similar a los sikuris actuales sólo que provistos de q´awa4 (Cuentas, 1928) y el chusllu señalakuy de Macusani (Bueno, 2009).

Kara-puli consignado por Cuentas Chusllu Señalakuy En cuanto a los sikus de una sola fila (no duales o complementarios) tenemos los kallamacho y loque palla palla de Conima, aunque también hay referencias de haberse tocado en la zona aymara al sur del lago Titicaca. 
Asimismo, hay fotografías antiguas de tocadores de estos sikus simples, no identificados (Verger, 1945 y Luna, 1973). En el Cusco aún subsisten los ayarachis de Chumbivilcas igualmente interpretados con sikus de una sola fila.
Fotografía de Verger (Ichu-Puno) Imagen consignada por Luna Loque palla palla Ayarachis de Chumbivilcas-Cusco Junto a estas expresiones tradicionales autóctonas tenemos al sikumoreno y
al sikuri (o como se ha dado en llamar últimamente, sikuris de uno y de varios bombos respectivamente), las mismas que a diferencia de las anteriores, tras haber sido reelaboradas por los mistis (mestizos), han gozado de una mayor atención y popularidad.
2. EL SIKUMORENO Y EL SIKURI
El origen de estas expresiones no está del todo definido. Para Alberto Cuentas (1928) el sikumoreno, caracterizado por el uso de trajes vistosos, es una danza colonial inventada por los españoles para utilizarlos como bandas en las fiestas religiosas, políticas y sociales. Hay referencias que anotan su presencia
ya a inicios de la republica5 por iniciativa de ciertos mistis (de ahí su antigua denominación de mistisikuri).
Las agrupaciones más antiguas documentadas son los “Sikuris del Barrio Mañazo”, quienes datan su fundación oficial en el año de 1892; y “Juventud Obrera” (1909), antes denominada “Obreros Pampeños del Puerto Lacustre” y “Los Marineros o Vaporinos” (1900)7. Publicaciones antiguas como las de los
esposos D´Harcourt (1925) y del mencionado Alberto Cuentas (1928) consignan fotos en Tacna y Puno respectivamente, donde se aprecian conjuntos vistosamente ataviados (seguramente patrocinados por algún
gamonal local), lo cual evidencia documentadamente la propagación y vigencia del sikumoreno ya desde ese entonces.
Fotografía de “sikuris” consignada por Cuentas (1928)
En cuanto a la modalidad sikuri, tal como la conocemos hoy en día, se caracteriza por el uso de varios bombos largos, orquestación en base a sikus de diversos tamaños (octavas), armonizada con cortes (bajos y contras), vestuario de puli puli e interpretación principalmente de huayños ligeros y
calmados. Se ha dado en reconocer que toda esta puesta fue un proceso realizado en Conima, de ahí que reclame la denominación de “cuna de sikuris”.
La agrupación emblemática de este pueblo, el conjunto “Qhantati Ururi”,
remonta su existencia al año de 1830, estando presentes en la fundación de ese distrito en 1854 y datar el tema musical “Camacho” de 1879. Por otra parte, gracias a su dinamismo y participación por medio de “contratas” es que logran llevar su expresión a distintos pueblos de la zona aymara al norte del lago Titicaca.
Thomas Turino (1993) anota que tanto en la reelaboración de la modalidad sikuri como en la formación de dicho conjunto en 1928, tuvieron participación los mistis de Conima. Específicamente señala a don Natalio Calderón, personaje que compartía los ideales indigenistas de su época, quien convoca a tocadores de distintos ayllus8 para conformar el grupo representativo de ese distrito, al que finalmente bautiza como Qhantati Ururi.
Este investigador norteamericano, quien realizó su trabajo de campo entre 1984-86, sugiere que la reformulación de esta modalidad, y consiguiente creación del estilo Conima, se opera a principios del siglo XX9 a partir de una expresión sikuri de varios bombos que ya usaba quintas (contras), a la que don
Natalio por sus conocimientos musicales como arpista le añade terceras voces (bajos).
En la grabación del Qhantati Ururi de 1965, todos los huayños ligeros son interpretados como zampoñada (“choclo”) y los huayños calmados con varios bombos; asimismo, la principal festividad en base a sikus en Conima es la Fiesta de Pascua10, en donde los grupos se reconvierten en la modalidad de Soldado Palla Palla que es básicamente una especie de zampoñada. Esta situación, también reparada por dicho investigador, le hace plantear la posibilidad de que el huayño ligero no sea más que la interpretación en varios bombos de la zampoñada, tal como suele ocurrir con el imillani originalmente interpretado con cajas (wankaras).
Hasta aquí, una vez establecidas ambas modalidades, y a despecho de las otras expresiones en base al siku incluso más antiguas y telúricas, el sikumoreno y el sikuri serán los que logren captar la atención de los coterráneos, siendo adoptados y asimilados en los distintos pueblos del Altiplano peruano, incluso con menoscabo de expresiones de música o danza lugareñas, proceso que en ese sentido evidencia un lado algo negativo11.
3. DESARROLLO HISTÓRICO
La aparición y desarrollo de los distintos conjuntos de sikuris y sikumorenos lo hemos periodizado en relación al devenir de la propia sociedad peruana de tal manera que, como no podía ser de otra manera, los cambios sociales generaron determinado tipo de repercusión en el movimiento sikuri.
1ra ETAPA: LOS GRUPOS HISTÓRICOS (Antes de 1970)
Hasta fines de los sesentas del siglo pasado, nuestra sociedad era oligárquica y latifundista12. Eran tiempos en los que no había mayor movilidad social y donde las personas generalmente estaban sujetas a sus lugares de origen. En este contexto, la vida transcurría tranquilamente según las ocupaciones de cada pueblo, en donde no faltaban ansiadas festividades que celebrar. Es así que la conformación de un conjunto de sikuris local que anime los eventos sociales era de esperar.
Otros factores propicios para la conformación de sikuris en la primera mitad del siglo XX fueron tanto la prédica indigenista que reivindicaba social y culturalmente al “indio”, así como la aparición de los primeros gremios laborales en el sector urbano.
En ese contexto, los distintos pueblos empiezan a tener sus primeros conjuntos que en el mejor de los casos serán los históricos o emblemáticos de sus respectivas localidades. Así tenemos cómo el grupo representativo de Conima (denominado “Sociedad de Tiro”, “Chojjña Mocco”, “Huayna Titicaca”, “Lágrimas Oscuras”) adquiere su denominación definitiva como “Qhantati Ururi” (1937)13. En la península de Huata y de extracción aymara-campesina, los “Sikuris Huata” pasarán a denominarse “Q´keni Sankayo”.

También de varios bombos tenemos a los “Rosales” de Rosaspata (1940) y otros anteriores como “Qetuña”, “Wari Uma” y “Ñapa”14. En Moho a “Marka Sikuris” además de los sikuris de LLoquesani, Lacasani, Occopampa, Waycuña15 y “3 de Mayo” de Huaraya. De Cojata “Los Mensajeros de los
Andes” (1966). En Huancané existían los “Sikuris Santa Cruz”16 y los de Inchupalla.
Sikuris de Cojata
En cuanto a los sikuris de un solo bombo, en Ilave estaban los “San Miguel”, “Santa Bárbara”, “Cahuide” y luego, promovido por algunos choferes, aparecerá la “Motorizada de Ilave” (1938). En Yunguyo son legendarios los “Choclos” y los “Alfonso” que posteriormente derivarán en la “Zampoñada 10 de Octubre” (1951). De manera similar, la “Lira Moho” (1941) aparece en el pueblo del mismo nombre17. En Huancané el “19 de Setiembre”, así como también “Los Choclitos” (además de varios grupos de comunidades); por otra parte “Santa Rosa” y Atahuallpa” en Lampa hasta antes del ´5018.
El profesor Flavio Condori nos refiere que en Carabaya (Crucero) se recibía con un grupo de zampoñas el oro proveniente de las minas de Santo Domingo; así como también que habían otros conjuntos en Ayaviri y en Azángaro (Asillo y San Antón). De esta última provincia, Alfredo Sumi (2013) recoge la versión que en las comunidades del distrito de Samán por 1930-40 habían grupos de zampoñas denominados bandas de phusa.

Además de Puno, se tiene registrado la tradición de la zampoñada en otros departamentos limítrofes. Los esposos D´Harcourt (1925) lo refieren en la hacienda Candarave de Tacna, hoy en día convertida en provincia. De ahí eran los “Choclos” y de Tarata “Los Amautas”19. Posteriormente surgen “4 de
Diciembre” de Cairani y “Zampoñas 24 de Julio” (1953) Ponchos Blancos de Camilaca20. Limitando con esta provincia está el distrito de Torata en Moquegua en donde también se practica la zampoñada, además de Coalaque, Matalaque, Ubinas. En Arequipa se practica en San Juan de Tarucani aunque
 con la denominación de Ayarache21.
En la ciudad de Puno, a los mencionados “Sikuris Mañazo” (asociado al gremio de carniceros) y “Juventud Obrera” (asociado a los trabajadores portuarios y del mercado central), se le unen los “Panificadores” (gremio de panaderos) y otros actualmente desaparecidos como el conjunto de pusamorenos “Arco Blanco” (1909)22 y “Los Pampeños”. Estando la ciudad de Puno étnicamente habitada al norte por quechuas y al sur por aymaras, existieron los conjuntos de zampoñas “Manto” y “Huerta Huaraya” de origen quechua y los “Checcas” de origen aymara23.
“Sikuris Mañazo” en 1952
Cabe mencionar en este periodo, que como parte de las primeras olas migratoria que se da hacia la ciudad de Lima, algunos puneños residentes, de forma recreativa y en su afán de rememorar las tradiciones de sus lugares de origen, forman las primeras agrupaciones de sikuris en la capital, a saber, “Unión Progresista Conima” (1954) y “Zampoñas del Titicaca”24(1956), ésta última solía hacerse presente en los festivales que otrora se realizaban en la Pampa de Amancaes, llegando a grabar un LP en 1966.
LP de “Zampoñas del Titicaca”

2da ETAPA: LA PROPAGACIÓN DEL SIKURI (1970 a 1997)
Con la emergencia de los nuevos movimientos sociales (barriales, agrarios, migratorios, sindicales, masificación de las universidades, etc.) y tras el golpe militar de inspiración socialista del general Juan Velasco Alvarado (1968), hay un cambio del statu quo. Este nuevo panorama hará que la práctica del sikuri
adquiera una significación distinta, más allá de lo meramente social recreativo.
Será la “Asociación Juvenil Puno” (AJP) la institución encargada de encarnar los nuevos tiempos.
Tras su fundación (1970) a partir de lo que era el Centro de Estudiantes Puno, ahora con una vocación más amplia y comprometida, encontrará en el sikuri el medio que canalice las nuevas aspiraciones. Es así que como un homenaje a los caídos en las protestas del pueblo puneño contra la señora de Velasco, denomina a su grupo de sikuris como “Conjunto de Sikuris 27 de Junio” (1972) y a su elenco de danzas “Candelaria Herrera”.
Esta institución practicará la modalidad de un solo bombo y sólo tras el viaje que realizara a Conima en 1977 adoptará la modalidad de varios bombos.
Como parte de su labor de revalorización y difusión de la cultura andina, especialmente la Aymara y Quechua, entre otras actividades, impulsa el primer encuentro de sikuris “Túpaq Katari” (1978) y la Festividad de la Chakana Cruz (1980) siendo su primer alferado, las mismas que hoy por hoy, son las
principales actividades que congregan a los grupos de sikuris en la ciudad de Lima.
Afiche promocional del “Tupaq Katari”
Los nuevos tiempos y la influencia de la AJP harán que aparezcan numerosas agrupaciones con un renovado sentido cultural, no sólo en la ciudad de Lima (denominados “regionales”), sino también en el mismo departamento de Puno, tal como ocurrió con la creación de la filial de la AJP en dicha ciudad (1979),
dejando lanzada la innovadora noción de “base” o “filial”, además de ser musicalmente un importante impulsor del estilo conimeño de interpretar el siku.
En cuanto a los sikuris de un solo bombo, aparece la “Agrupación de Zampoñistas del Altiplano” (1972) como un intento de mantener vigente la tradición del sikumoreno en la ciudad de Puno, los “Huj´maya” (1978) que tres años más tarde cambian a la modalidad de varios bombos y “Juventud Paxa” (1982).
Del mismo modo en Juli “Roma Americana” (1977), en Yunguyo “Fuerza Musical 26 de Mayo” (1982) y en sus respectivos pueblos: “Melodías de Ilave” (1975) y la “Asociación Juvenil Cabanillas” (1980) inicialmente filial de la AJP (cambia a la modalidad de varios bombos en 1986).
En cuanto a la modalidad sikuri de varios bombos, el primer grupo en la ciudad de Puno fue “Pukara” (1978)25. Además del mencionado “AJP Base Puno” (1979) tenemos a “Fuerza Joven” (1982).
Por otro lado el grupo “14 de Setiembre” (1978) en Moho; “Claveles Rojos”
(1980) y “Aymaras” (1981) en Huancané; “08 de Diciembre” (1982) en Lampa y “Wayra Marka” filial AJP en Juliaca (1982)26.
Para la ciudad de Lima, además de los denominados sikuris “regionales” (de residentes puneños) como Centro Social Conima (1971), “Sankayos de Moho”, “Unión Puno” (1975), “10 de Octubre” (1978); aparecen los autodenominados sikuris “metropolitanos” (de no puneños). Las primeras de estas agrupaciones aparecen en distintas universidades: “Sikuris TEA” (1974)27 de la Pontificia Universidad Católica del Perú, “Conjunto de Zampoñas de San Marcos” (1977)28 de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, TAJMA (1978) de la Universidad Nacional Agraria, FOLKUNI (1980) de la Universidad Nacional de Ingeniería. También inicialmente relacionados al medio universitario surgirán la asociación cultural “Kunanmanta” (1981) y “Runa Taki”29 (1981).
La propagación del sikuri también se empezará a realizar en otros departamentos del país, especialmente en los receptores de la migración puneña, teniendo entre los primeros a: 
AREQUIPA: “sikuris de la UNSA” (inicios ´70).
CUSCO: “AJP filial Cusco” (1982).
TACNA: Surgimiento de zampoñadas en todas sus provincias.
MOQUEGUA: “Los alegres de Tassa” en Ubinas (1987).
JUNÍN: “Walayai´kan” (1979) en Jauja, “Samichay” en Concepción, “Sikuris de la UNCP”30 en Huancayo.
Los ´80 será la década en que se dé el mayor auge y proliferación de los grupos de sikuris, para luego ser afectados a inicios de los ´90 por la crisis económica y la violencia política.

3ra ETAPA: CONFLUENCIA Y UNIVERSALIZACIÓN (1997 hacia adelante)

Superando las dificultades anteriores y de cara al nuevo milenio, los sikuris entran a una etapa de nuevas perspectivas. Por un lado, a nivel nacional, se avanza hacia una mayor interacción entre sikuris regionales y metropolitanos, aymaras y quechuas, puneños y de otros departamentos; mientras que por otro lado y a nivel internacional, se empieza a practicar el sikuri específicamente peruano en distintas latitudes del mundo.
En Lima, dado el avance de los metropolitanos y reconocimiento adquirido como a los mayores nexos con los regionales, las suspicacias de estos sobre aquellos fueron quedando de lado, siendo la participación en el encuentro de sikuris Túpaq Katari de 1997 en igualdad de condiciones entre todos, donde quedan tácitamente superadas dichas diferencias, incluso se quiso hacer patente esa unión con la conformación de la Asociación Nacional Sikuri (ANS) en ese mismo año.
Hoy por hoy, la diferenciación entre regionales y metropolitanos ha quedado algo difusa toda vez que muchos de aquellos mantienen una alta participación de no puneños y sus ensayos, antes ocasionales y específicos en función a determinadas actividades de los coterráneos, empiezan a ser más continuos y
siguiendo patrones menos tradicionales.
En Puno, superando diferencias étnicas, la expresión de sikuris de varios bombos originariamente propia de los aymaras del norte del lago Titicaca se esparce por pueblos donde nunca ha habido ni es su tradición. Es el caso de las ciudades de Puno y Juliaca; de pueblos quechuas como Lampa, Ayaviri, Santa Lucía, Azángaro, Samán, Asillo, José Domingo Choquehuanca, Coata, Capachica; y más recientemente pueblos aymaras del centro y sur del Lago Titicaca como Platería, Ácora, Ilave y Juli. Incluso expresiones autóctonas como los ayarachis quechuas de Cuyo Cuyo se “aymarizan”.
A nivel inter-regional, ha habido una temprana incursión de grupos puneños en especial de los principales exponentes, como el viaje de los “Sikuris Mañazo” a Lima (1935), Cusco (1942), Arequipa (1965) y Huancayo (1966); y del “Qhantati Ururi” a Lima (1939 y 1965), que le valió también para grabar un disco Long Play; como también lo hicieron grupos de Cojata (“Los mensajeros de los Andes” en 1966), Cairani (“4 de Diciembre” en 1973) y Camilaca (“24 de Julio” en 1976).
También tenemos la presentación de música y danzas del “Wiñay Qhantati Ururi” en Lima (1995), así como la participación de grupos puneños en el concurso Túpaq Katari como “Mañazo”, “Zampoñistas del Altiplano” y “29 de Setiembre” de Ilave. Por su relativa cercanía; Cusco, Arequipa y Tacna han
sido continuamente visitadas por grupos altiplánicos.
LP de “Qhantati Ururi” de 1965 (Imagen tomada de Revista Aswan Qhari)

Particularmente significativa fue la presencia de “Kunanmanta”, “CZSM” e “Illariq” en el “Encuentro de Sikuris del Centro” realizado en Huancayo (1989), así como la presentación ese mismo año del jaujino “Walayai´kan” en el Túpac Katari. Entre tantos otros viajes a provincias de los metropolitanos.
Sin embargo, es a partir de este período que grupos de distintos departamentos empiezan a tener presencia en el mismo Puno31. El ir hasta allá incluso a competir de igual a igual con los mismos grupos altiplánicos había sido antes algo impensado. Así tenemos que desde el 2003 “Rurarccaya” va participando de la Octava de la Festividad de la Virgen de la Candelaria de la ciudad de Puno. El 2005 participan notablemente de la Candelaria el “Conjunto de Zampoñas de San Marcos” y “Rurarccaya” como representantes de Lima en uno y varios bombos respectivamente32.
“Rurarccaya” de Lima en Puno

Del mismo modo, el Centro Cultural “Qosqo Taky” de la ciudad del Cusco (tras clasificar en el concurso regional de sikuris de Puno) participa del concurso folklórico de dicha festividad el 2008. Ese mismo año “Rurarccaya” participa de la Fiesta de las Cruces de Huancané y los sikuris “TAJMA” viajan a Yunguyo a
participar en el concurso de zampoñas por la Festividad de San Francisco de Borja “Tata Pancho”. El 2009 los “Aymaras de Huancané Base Lima-Callao” también viajan a la Fiesta de las Cruces de Huancané. El 2012 los “Aymaras de Huancané Base Tacna” viajan a la Fiesta de San Santiago de Huayrapata- Moho.
En cuanto al frente externo, lejos de la presentación ocasional de sikuris peruanos en el extranjero como el viaje a Europa de los sikuris de Taquile (1984) y de la AJP (1992), el viaje a Italia organizado por el grupo europeo “Trencito de los Andes” con algunos integrantes de “Aymaras de Huancané” y
“Qhantati Ururi” (1994), o el viaje al Japón del grupo metropolitano “Surimanta” (2005); hoy en día ya se encuentran constituidas agrupaciones en otros países que tocan exclusivamente sikuri peruano (especialmente de varios bombos) impulsadas generalmente por migrantes peruanos en tierras lejanas.
“Trencito de los Andes” en Italia con sikuris peruanos “Surimanta” en Japón 
Respecto a la modalidad sikuri tenemos que a nivel latinoamericano es importante su difusión en:
ARGENTINA33: “Aymaras de Huancané Base Argentina” (2004), “Fuerza Joven” (2007) 34, “Aymaras de Huancané Base Provincia de Buenos Aires” (2007), “Q´hantati Ururi Base Argentina” (2008); en Buenos Aires. Del mismo modo, allí existen otros grupos que no han sido impulsados por peruanos pero
practican nuestro sikuri: “Sartañani” (1999), “Poder Sikuri (2004) y “Utu Ajayu Warmi” (2010) grupo este último exclusivamente femenino.
BOLIVIA: “Aymaras de Huancané base La Paz” en dicha ciudad. Igualmente hay agrupaciones en Chile35(“Santiago Marka”) y Colombia36 (“Juaica”) que interpretan el sikuri peruano como parte de su repertorio.
USA: Pese a la gran colonia de peruanos migrantes sólo tenemos consignados a “Wayra Marka” (2003) en New Jersey y “K´hantati Los Andes” (2009) en Virginia.
“Aymaras” base Argentina “K´hantati Los Andes” USA En Europa, luego de haber tenido amplia difusión a través de los grupos de música latinoamericana, el siku, esta vez con su expresión colectiva primigenia:
el sikuri, ha empezado a ser practicado en varios países del viejo mundo en donde se está gestando un nuevo movimiento de identidad y afirmación de nuestros valores culturales andinos.
Los grupos de sikuri peruano37 lo practican junto a otros hermanos latinoamericanos y europeos(as) interesados en cultivar nuestro arte. Cabe mencionar que además del accionar en sus respectivas ciudades de acogida, se realizan encuentros de sikuris, celebraciones del Inti Raymi y demás eventos culturales que a la vez son ocasión para el reencuentro de los migrantes peruanos en esas tierras lejanas. 
Así tenemos:
ALEMANIA: “Fuerza Sikuri” (1999) en Berlín, “Raymi” (2007) en Stuttgart,
“MALCA”38(2005) en Hamburgo.
ESPAÑA: “Runa Taki” (2002) y “Katari” (2008), en Madrid.
ITALIA: “Aymaras de Huancané Base Roma” (2006) en dicha ciudad.
AUSTRIA: “Kenaya” (2002) en Graz.
FINLANDIA: “Qhana Pacha” (2008) en Helsinki.
FRANCIA: “WIÑAYATAQUI” 39 (1989) en Nantes.
“Aymaras” base Roma “MALCA” de Hamburgo (en Bremen)
En cuanto a la práctica del sikumoreno, sabemos que al menos desde el 2009, peruanos particularmente dedicados a la música latinoamericana en ciudades de Francia y Suiza hacen una “reunión de sikuris”, especialmente en Ginebra SUIZA, para tocar bajo la denominación de “Sikumorenos del Perú”.
En ARGENTINA se acaban de formar los “Inti Phaxi” (2012).
“Sikumorenos del Perú” en Suiza “Inti Phaxi” de Buenos Aires 
De todos estos grupos de sikuri peruano en el extranjero, son los “Aymaras de Huancané Base Argentina” los primeros en haber hecho el esfuerzo de venir a tocar al Perú, específicamente en la Fiesta de las Cruces de Huancané (2011).

4. CONCLUSIONES
Frente a una gran variedad de expresiones tradicionales en base al siku, son el sikuri y el sikumoreno las expresiones que han venido imponiéndose sobre otras de raigambre autóctona. Del mismo modo, el siku dual o complementario es el que ha venido desplazando largamente al siku simple o unitario.
Comúnmente se hace referencia sobre todo en cuanto a la modalidad sikuri, a que se trata de una expresión milenaria, cuando no está del todo esclarecida su antigüedad. Seguramente se recreó sobre la base de alguna expresión anterior también de varios bombos y que interpretaba los denominados huayños calmados. Dicha expresión en específico y tal como la conocemos hoy en día, proviene de inicios del siglo XX (Conima).
El sikumoreno, con su característico traje de luces40, es la expresión que en un primer momento logró la mayor propagación, siendo usual la antigua denominación de “choclo” para la expresión, y por extensión, para las primeras agrupaciones que la practicaban.
El sikuri y el sikumoreno son expresiones en cuya reelaboración participó directamente el sector misti andino. Avanzando el siglo XX empiezan a ser adoptados por distintos pueblos quienes conforman sus grupos “históricos”. A partir de la década del 70 y favorecido por las transformaciones de la sociedad peruana, se genera un mismo impulso que ocasiona la proliferación de grupos tanto en el departamento de Puno como en la ciudad de Lima41.
Contrario a lo que se suele suponer, agrupaciones de varios bombos representativas del departamento de Puno como 14 de Setiembre de Moho (1978), Claveles Rojos (1980) y Aymaras (1981) de Huancané o la AJP de la ciudad de Puno (1979); no son tan “antiguas”. Más bien vienen a ser contemporáneas con los primeros sikuris metropolitanos de la ciudad de Lima, en tal sentido copartícipes del mismo impulso de revalorización de la cultura andina.
Tanto en la ciudad de Puno como en Lima y aún en el extranjero, es la modalidad de varios bombos la que paulatinamente se ha ido imponiendo sobre la de un bombo, especialmente por el criterio extendido de que el sikuri es más “auténtico” y “autóctono”42, más no “mestizo” y “reciente” como el sikumoreno.
Tal como está ocurriendo a nivel nacional como internacional, el arribo individual y hasta grupal de sikuris no hace más que confirmar el carácter de Puno como la “Meca de los Sikuris”.
En suma, la expresión sikuri tiene la capacidad de darnos cuenta de las transformaciones de nuestra sociedad; así como la virtud de permitir canalizar ideales, especialmente en los jóvenes, de expresividad, comunidad, valoración e identificación cultural, denuncia de los problemas que nos aquejan, ganas por hacer algo. He ahí poderosas razones que explican su vigencia y propagación, Incluso en el extranjero.

NOTAS:
1 Trabajo inicialmente presentado en el 1er Congreso Nacional e Internacional del Siku (12 / 11 / 2011).
2 Anoqarí, según Oscar Bueno (2009).
3 Muestra del profesor Flavio Condori
4 Coraza con diseño de piel de felino.
5 Gerardo Ichuta (2003) registra su presencia, relatada en un diario de La Paz, en 1825.
6 Macedo (2006)
7 José Calisaya y Fernando Medrano (2013)
8 Para Gérard Borrás, en un extremo, la obligación de participar de las prácticas musicales podrían ser vistas como “uno de los elementos de la explotación que sufrían los indígenas” Borrás (2000: 139).
9 Por el lado de Bolivia, André Langevin en su investigación sobre los kantu de Quiabaya recoge la
versión que refiere su aparición a inicios del siglo XX (años 10 ó 20). De Charazani recogió la versión
según la cual en 1925 el ritmo de marcha característico se realizó a sugerencia de un preste (alferado)
(Langevin 1990: 118 y 134).
10 El Sábado de Gloria por la noche, de Semana Santa.
11 “… y con gran perjuicio del arte indígena, se van propagando entre los indios, borrando las huellas de
las verdaderas danzas indígenas (Gonzáles 1947: 41)”, citado por Ichuta (2003).
12 Finalmente liquidada tras el golpe militar de Juan Velasco Alvarado (1968) y su Reforma Agraria.
13 Según información de Augusto Calderón que le fue proporcionada a Turino (1993:280).
14 Comentario de Wilber Ormachea al video: http://www.youtube.com/watch?v=2DvLejlFPW0
15 Versión recogida por Wilber Martínez.
16 Comunicación personal de Héctor Suca.
17 Que mucho después se transformará en el conjunto “14 de Setiembre” pero ya de varios bombos.
18 Sánchez, 2013:157
 19 Chat de Héctor Estrada
20 Aporte de José Mamani en Facebook institucional
21 Comunicación personal de Javier Lajo
22 José Calisaya y Fernando Medrano, 2013
23 Comunicación personal de profesor Flavio Condori
24 Ambas en la modalidad de un solo bombo, aquella adoptará los varios bombos mucho después en
1973.
25 Bueno (2009:14)
26 Según Turino (1993) todos seguidores del estilo Conima en desmedro de sus propias variantes locales.
27 Siglas de Taller Experimental de Arte, primer grupo metropolitano de la ciudad de Lima. Impulsada
por Javier Lajo, arequipeño de origen puquina, entonces estudiante de la facultad de ciencias sociales.
28 Por acción “indirecta” de la AJP, ya que en el Centro de Folklore de la Universidad de San Marcos (La
Casona) y sin la anuencia de aquella, uno de sus integrantes (Vicente Mamani) empezó a dictar clases de
zampoña a estudiantes y público en general.
29 Quienes a diferencia de los anteriores y muchos de los que vendrán después, adoptaron el sikuri de
varios bombos.
30 Universidad Nacional del Centro del Perú
31 Ya en 1985, el grupo regional de Lima Centro Social Conima había viajado en conjunto a su localidad de origen y los metropolitanos “24 de Junio” participaron de las Albas de Ilave en 1994. 
32 Previa clasificatoria organizada en la capital por la Federación Regional de Folklore y Cultura de Puno.
33 En este país hay un creciente y notable movimiento de sikuris con agrupaciones que practican el sikuri
de Perú, Bolivia y Chile. El “Mathapi Apthapi Tinku” es la actividad central que los congrega anualmente
desde el 2005.
34 En el 2011 cambia a “Taki Onkoy”, nombre de la agrupación del mismo nombre de Lima, de donde
provinieron sus principales impulsores.
35 Desde el 2009 realizan su “Encuentro de Lakitas” en el Cerro Blanco (Apu Wechubara) Santiago de Chile.
36 El 2012 hicieron su “Primer Encuentro de Tropas de Sikuris de Colombia” en Bogotá, contando con
nueve agrupaciones participantes, organizada por la “Comunidad Zampoñas Urbanas” (2002).
37 A su vez, hay numerosas agrupaciones de sikuri boliviano interpretando sus expresiones (kanthus,
italaque, zampoñada) en ciudades europeas: París, Lyon y Rennes (Francia), Bruselas (Bélgica), Roma
(Italia), Londres (Inglaterra), Ámsterdam (Holanda) y Budapest (Hungría).
38 Siglas de Movimiento Andino Libre Cultura y Arte.
39 Grupo francés que interpreta música del Altiplano especialmente el sikuri peruano de varios bombos,
además del sikumoreno, aunque manteniendo la instrumentación del anterior (muy usual en Europa).
40 Elegantemente confeccionados con plumas, bordados y pedrerías.
41 Denominado “urban pampipe movement” por Turino (1993).


BIBLIOGRAFÍA
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http://www.youtube.com/watch?v=4Eylp9d4ENQ (Reunión de Sikuris, Ginebra 2009)



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miércoles, 19 de marzo de 2014

El Sicu Moreno en la Diablada de Puno

Óleo de Víctor Humareda (Puno 1920 - Lima 1986)
Origen y significado de la danza

La figura del diablo como símbolo arquetípico del mal llegó con los conquistadores españoles en el siglo XVI. En el pensamiento prehispánico el antagonismo radical entre el bien y el mal no existía, pues según el principio dual andino, todas las deidades portaban un componente positivo y negativo que actuaban complementariamente. Los evangelizadores y extirpadores de idolatrías identificaron como diabólicos a las deidades andinas (despojándolas de sus significados originales) para así justificar su estigmatización y destrucción.
En la mentalidad post-medieval de los europeos, todas las guacas (adoratorios) y entidades del paneteón andino fueron consideradas diabólicas.  De ellas,  Supay descolló como el espíritu que personificaba al cornúpeta: “claro está que la elección fue completamente arbitraria si se da crédito a la definición más antigua de Zupay, la que ofrece Domingo de Santo Tomás en su Lexicón (1560): Angel bueno o malo, demonio o trasgo de casa…" (Pierre Duviols en Cuentas Ormachea, p. 33).  Otros espíritus identificados con  la idea cristiana del demonio son elHuapuñuñu el Bisocho, el Humapuricuc, el Tío, el Muqui, entre otros. En la zona del Cusco, aparte del término Supay o Humapuricuc, está el término Saqra

Debemos decir entonces que la concepción colonial del Supay es mestiza, y es con ella que se construye el corpus simbólico de la danza de la Diablada altiplánica. Es una danza que expresa un profundo sincretismo entre los símbolos religiosos católicos e indígenas. De carácter colectivo, inicialmente la ejecutaban sólo hombres. Desde la década de 1950 comenzaron a incorporase mujeres (como chinas-diablas, chinas y mamachas). De acuerdo a Julia Elena Fortún (destacada investigadora boliviana), es una danza de salto, extrovertida, a diferencia de las danzas autóctonas, que son cerradas y cuyos pasos son más “de tierra”.

Es bueno recordar que la figura del diablo en la danza popular no es exclusiva de la zona altiplánica; se presenta de distintas maneras en toda América Latina, y en el caso del Perú, aparte de la de Puno se pueden mencionar el Son de los Diablos de Lima, la Danza de Diablitosen Piura, Los Diablos en Cajabamba (Cajamarca), la Danza de Diablos en Ancash (Chiquián), losDiablicos de Jayanca y los de Túcume (Lambayeque), los Saqras del Cusco (Acomayo, Paucartambo), etc.

El Padre Rubén Vargas Ugarte en su Historia del culto a María en Iberoamérica nos dice: “Desde el 2 de febrero de 1583 la Virgen de la Candelaria asentó sus reales en la zona del Collao y comarcas colindantes, extendiéndose rápidamente la fama de sus milagros” (Cuentas Ormachea, p. 39). La Danza de Diablos en el Collao se relaciona directamente con el culto a la Virgen de la Candelaria (llamada Virgen del Socavón o Virgen de los Mineros en Oruro) por lo menos desde fines del siglo XVIII.  Su identificación como culto de mineros se explica más o menos así: los espíritus autóctonos demonizados (el Supay, o Tío, o Silala) que habitan el subsuelo inspiran el personaje sincrético del diablo; los mineros danzan disfrazados de diablos para que la Virgen les conceda perdón por haber conciliado ritualmente durante meses con los espíritus subtrerráneos, pues son ellos los que señorean ahí, y los que les permiten ubicar las mejores vetas y extraer el mineral. Las luces de que hacen gala en los trajes representarían la riqueza y brillo de los metales que guardan las entrañas de la Tierra, y las grotescas criaturas que adornan sus máscaras, representan no sólo ese mundo subterráneo, sino elementos muy complejos de la cosmovisión collavina, tema que no aborda este breve texto. Como veremos líneas abajo en el breve recuento de las principales leyendas de origen, sólo una en cada lado de la frontera (la leyenda paceña sobre el derrumbe de la mina en Oruro, y la de la mina Laycacota en Puno, ambas del siglo XVII), se refieren a una mina y a mineros.